La prensa de Cantabria, al dictado del PP

Ya conocen ustedes, probablemente, la persecución a la que se vio sometido hace unos años Patxi Ibarrondo, director de La realidad, una revista cántabra alternativa que cometió el gran pecado de meterse a desvelar los negocios del secretario general del PP de la época y miembro del Consejo de Administración de Caja Cantabria, Carlos Sáiz. Ibarrondo y los periodistas que con él trabajaban en la revista vieron cómo ésta era cerrada sin sentencia firme a instancias del dirigente ultraderechista y por mediación de una juez muy dispuesta a defender el derecho al honor de los miembros de consejos de administración de cajas de ahorro.

Después de ese cierre, el ex-director de la publicación continuó sufriendo el acoso sañudo del infame Carlos Sáiz, quien exigió que se embargara la pensión de invalidez de la que vivía Ibarrondo para así resarcirse (él, que nada en la abundancia) de la multa que, como responsable de la publicación, cayó sobre el periodista. La juez decretó el embargo de la pensión. Ésta es la forma en que la juez y el político proclaman sus respectivas honorabilidades.

Pues bien, el pasado 5 de julio unas pocas organizaciones sociales cántabras convocaron una rueda de prensa para anunciar la constitución de un comité de apoyo a Patxi Ibarrondo. Ni un sólo medio de comunicación cántabro apareció por allí. Quizás sea que las apasionantes noticias que el mes de julio depara fueran tan acuciantes que les impidiera enviar a un solo periodista a cubrir la información. Quizás sea que todos los medios "profesionales" de Cantabria estén directa o indirectamente comprados por Carlos Sáiz. Elijan ustedes su respuesta.

Yo aquí les enlazo con el comunicado que las radios y los periódicos cántabros no publicaron, rogando le den la máxima difusión posible. Su salud y su honor se lo agradecerán.

Comentarios

J. G Centeno ha dicho que…
D. Antonio, usted sabe mejor que yo que la libertad es interpretable. ¿Desde cuando el ESTADO, es neutral en la libertad de expresión? Ese estado, en negrita y con mayúsculas, que contiene a todas las instituciones, incluidas la judicatura y el poder legislativo, esta al servicio de las clase social hegemónica en el poder, y ese estado consiente cierto grado de libertad y hasta cierto punto, una vez traspasados cierto límites los mecanismos represivos se ponen en marcha bien crudamente, como es el caso que nos ocupa, bien de forma más sutil e indirecta. Incluso económica. Usted conoció de forma directa como se hizo naufragar un proyecto de prensa progresista, como fue Liberación
AF ha dicho que…
Bien que me dolió. De todas formas, a fuer de ser sincero, he de decir que Liberación no se hundió sólo (aunque sí principalmente) por el acoso del sistema. Su calidad era como minimo discutible y, aunque eso era en parte debido a la falta de medios provocada por el mencionado acoso, lo cierto es que no debería de haberse lanzado un proyecto que no tenía garantizada una calidad informativa mínima.

El resultado de haberlo hecho fue que Liberación, creo yo, sepultó por décadas la posibilidad de plantearse la misma iniciativa con mejor enfoque.
Fritz ha dicho que…
En obediencia a su solicitud (como siempre) he añadido una entrada a mi blog. Además de ahí fijo que sacamos una discusión.

Saludos
AF ha dicho que…
Su actitud le honra, eminente popperiano. La discusión queda aceptada, aunque le propongo que introduzca usted los términos de la misma. Eso sí, dado que estoy de vacaciones le ruego que lo deje para mi vuelta. Una cosa es que comente en algunos blogs, o que escriba algo muy anecdótico (o urgente, como es este caso), y otra que desde la playa me vaya a meter en camisas de once o más varas.

Un saludo.
Fritz ha dicho que…
Sr. relativista, no creo necesario hacer una "introducción de términos" para este debate, ni nada que se le parezca. Llegado el caso pediré explicaciones sobre los que crea que no están suficientemente claros, es decir, espero que las palabras quieran decir algo concreto; por lo general -como yo hablo en coloquial- bastará con que signifiquen lo que suele entenderse cuando se los utiliza. Las más de las veces no hay por qué perderse en definiciones, solo hace falta voluntad de entendimiento y honradez.

Saludos

PD: Para empezar, si le parece, podría decirme (allí) si apoya la idea multicultural y por qué. Cuando quiera, claro está.