Los nombres de las cosas

Los nombres de las cosas se dan una vez y, salvo raras ocasiones, así hay que dejarlos. Es odiosa la repetitiva costumbre de la era actual de deshacerse constantemente del pasado, tanto da si es de las fosas comunes del franquismo como si es de los nombres de las estaciones de metro.

Me refiero con esto último a lo que el bueno de Jaime Biencinto, un señor serio y progresista con mirada inteligente y que, además, tiene patillas, cuenta en su blog Escribir en alto, acerca de la marca Samsung y su campaña publicitaria en el Metro de Madrid, empapelando totalmente la emblemática estación de Sol y cambiándole el nombre por el de Sol Galaxy Note! (que manda narices...).

Al parecer los directivos de Metro se han lanzado a esta novedosa tendencia publicitaria con las cuentas de que podrían obtener por este medio ingresos publicitarios muy superiores a los obtenidos con los soportes de publicidad habituales en esa red de transporte. Y yo me pregunto, ¿todo vale?

Sólo con el paso del tiempo se descubre lo acertado de un nombre, lo bien que le cuadra a la cosa a que nombra.Y a la estación más céntrica de Madrid le pega mucho llamarse Sol, qué quieren que les diga.

Yo propondría a los directivos de Metro una forma de obtener ingresos publictarios extra que, obsesionados como están por hacer del Metro una fuente de beneficios privados, sin duda les gustará mucho: yo me comprometo a conseguir 100.000 personas de Madrid que donen 50 céntimos cada una, llegando por tanto a un monto total de 50.000 euros, a cambio de que un directivo o directiva de la compañía se pasee en ropa interior por el andén de la línea 1 del metro madrileño, un lunes entre las 7:30 y las 8:00 de la mañana. Y si en lugar de ser sólo un directivo/a, son 5, pues ahí tendrán 250.000 euros... ¡en sólo media hora!

Voy a ponerme manos a la obra y en cuanto tenga el compromiso de esas 100.000 personas, les mando una carta, que seguro que aceptan.

Comentarios

RGAlmazán ha dicho que…
Apúnteme, D. Antonio. Y dígame dónde le mando los 2,50 para que los cinco directivos de Metro se pongan en bolas u ovarios por el andén. Por cierto, no invite usted a Dª Espe, porque mi estómago no está para trotes.

Salud y República
Anónimo ha dicho que…
Machista de mierda.
Freia ha dicho que…
Mi querido don Antonio:

Me da amí en la nariz que el anónimo ese que le ha salido, amén de estúpido (o estúpida), es cegato (o cegata). No se ha enterado de nada, jajaja.

Si me admite un consejo, ¿por qué no evita las dichosas palabritas, la opción de permitir comentarios anónimos? De esa forma, los de siempre nos ahorramos el filtro y Vd. Se ahorra los comentarios estultos.

Un abrazo muy fuerte y hágase el vivo (que diría un italiano€ de vez en cuando.
Freia ha dicho que…
Mi querido don Antonio:

Me da a mí en la nariz que el anónimo ese que le ha salido, amén de estúpido (o estúpida), es cegato (o cegata). No se ha enterado de nada, jajaja.

Si me admite un consejo, ¿por qué no evita las dichosas palabritas, deshabilitando la opción de permitir comentarios anónimos? De esa forma, los de siempre nos ahorramos el filtro y Vd. se ahorra los comentarios estultos.
Un abrazo muy fuerte y hágase el vivo (que diría un italiano) de vez en cuando.
Anónimo ha dicho que…
Claro, freia, claro, no me entero de nada. El comentario de rgalmazán lo he malinterpretado.

Y ¿Que es lo que no le gusta a freia?
¿La palabra machista o la palabra mierda?
Parece que la palabra estúpido o estúpida si le gusta.

Desafortunadamente para freia el autor de este blog no usa filtros anti libertad de expresión.
Antonio Flórez ha dicho que…
¡Hombre, don Rafael, sea usted más rumboso, que por 50 céntimos yo creo que se puede usted permitir mandar despelotarse al menos a diez directivos! Hoy en día, con 5 euros apenas si desayunamos. Pero coincido con usted en no invitar a Dª Espe a formar parte de la apuesta, que cada vez está más arrugada me temo que también nosotros, pero en fin...).

¡Doña Freia, qué gran placer...! Pues igual tiene usted razón, pero no sé si me entero de lo que me propone usted, que a veces se me cortocircuitan los estraperlos magnesiados.

Sí que creo que es mejor quitar lo del katchap ese, o como se escriba, lo puse porque tuve una temporada en que no hacía más que recibir comentarios spam, y era bastante enojoso.

Sin embargo, no querría impedir comentarios que no sean estrictamente spam, por más que aquellos que firman como anónimos resultan un tanto inútiles, pues tengo por costumbre no contestarles, como haré en esta ocasión.

Espero en breve poder hacer un poco más acto de presencia vital, pero la cosa está tan achuchada que sólo puedo estar recluido... no me da para más el presupuesto.

Un saludo.
JaimeBMartín ha dicho que…
Antonio, hombre descreído, ves cómo los blogs sí sirven para algo.

Un saludo (con patillas),

Jaime B
Antonio Flórez ha dicho que…
Jajajaja, muy bien Jaime, te doy la razón...