Termina la hora de los yonquis

Dicen que algún preso de ETA ha llamado "niñatos medio yonquis" a los actuales dirigentes de su organización. Si es verdad, pocas cosas habrá habido en la historia reciente de la lucha antiterrorista que marquen más el comienzo de un final que esta frase. Sin embargo, bueno será recordar que hace ya años que muchos presos de ETA andan renegando, en voz cada vez más alta, de la táctica seguida por las distintas direcciones de la organización. Y esa voz no ha sido escuchada, o al menos no ha sido atendida, quizás porque la propia velocidad a la que las direcciones han necesitado sucederse, debido a la contundencia de la acción policial, ha ido desbaratando, creo yo, los lazos que en otros tiempos se establecían entre la dirección de ETA y sus presos.

Pero es el caso que, con las voces de los presos desatendidas, ETA ha seguido en sus trece, continuando con la proverbial incapacidad para situar la política en el puesto de mando de su actividad y dejando que sea el gatillo el único altavoz de sus reivindicaciones. Hay que ser prudentes, pues, a la hora de establecer relaciones causa - efecto entre las declaraciones como la del anónimo preso etarra, y un cambio de dirección de la banda.

En cualquier caso, lo que sí parece prácticamente a punto es el comienzo de otro final, que sería el de la preponderancia al cien por cien de la dirección de ETA sobre los aparatos políticos de su entorno. Las declaraciones de Otegi, hoy en rueda de prensa, traen una novedad para mi gusto muy sabrosa: la que supone el hecho de hablar en términos políticos y sin las reservas antes tan habituales respecto a la decision última (que siempre era de la dirección militar). Otegi ha hablado de avanzar en unos objetivos de unificación de la izquierda independentista, y eso sólo o principalmente puede referirse a Aralar (aunque pueda haber guiños a otras formaciones), cosa que la dirección de esta última ha entendido rápidamente, como lo demuestra la rápida respuesta de Patxi Zabaleta, su principal dirigente.

Oyendo esas propuestas iniciales y esas iniciales respuestas, dejo de oir a ETA. Los dirigentes de la organización terrorista no tienen casi nada o nada que decir en un diálogo de esa naturaleza. Esperemos que no haya en breve ninguna acción de cualquier posible niñato medio yonqui, o de cualquier político sumamente interesado en que no se acabe ETA como excusa, para que las cosas avancen por donde hace mucho que deberían haber avanzado.

Y, de paso, si las cosas toman ese rumbo, habré de reconocer, mal que me pese, las virtudes de una política de dureza policial que sigo creyendo inadecuada, pero que la propia tozudez de sus víctimas habrán hecho buena.

Comentarios

SPOOK ha dicho que…
Espero y deseo que los hechos confirmen su análisis.
Tras haber visto anoche en TV “Omagh” sería triste que ocurriese algo parecido, que alguna “mano negra” les cambie hierba por nueces
faidit ha dicho que…
La única salida de la izquierda abertzale es renegar del terrorismo, y creo que cada vez más gente de este entorno se está dando cuenta de ello. ETA se está conviertiendo en simplemente una banda mafiosa profesional y eso solo perjudica a sus pretensiones políticas. Cuanto antes reniegen de la "lucha armada"? mejor les irá. Ojalá se imponga la vía politica: supondría taparles la boca a muchos que utilizan el terrorismo y el nacionalismo vasco (metiendo todo en el mismo saco) para sacar votos en otras comunidades. Y por fin podríamos disfrutar de la PAZ.
Naveganterojo ha dicho que…
Espero como SPOOK que ninguna mano negra o mano politicamente desquiciada, lo eche todo a perder, no olvidemos que ETA da votos a quien no los consigue con buenas propuestas politicas.
Un saludo
Ciberculturalia ha dicho que…
El matrimonio del PP con el PSE traerá tensión, frentismo y cuántas cosas más que ninguno deseamos. Creo que es un craso error político. y como siempre digo cada vez que hablo de este tema, ojalá sea tan solo una mirada bisoña por mi parte. Ojalá! Un abrazo