En contra del sistema

Para mi sorpresa, me encuentro con una polémica dentro de IU que no se centra en las formas y métodos de elección del nuevo coordinador general, ni siquiera en la persona misma que lo será, sino en un tema más de política general como es el del rechazo o no a la actual constitución y los aspectos en que, en cualquier caso, debería ser reformada.

La polémica surge de una especie de directiva del PCE en la que anima a sus miembros a plantear en diversos foros (entre ellos el de las distintas instituciones en las que IU está representada) el rechazo a la Constitución de 1978, rompiendo de esa manera el pacto constitucional que el propio PCE ayudó a poner en pie a mediados de los '70. Algunos cargos electos de IU en ayuntamientos han puesto en práctica esta directiva ya y también han sido criticados por ello.

Comprendo perfectamente una parte de las críticas que desde otros sectores de IU se hacen al PCE por esta directiva, ya que, cuestiones meramente formales al margen, el mero planteamiento de cuestiones en foros en los que la representación la ostenta IU ya pone sobre el tablero la posible visión que el partido pueda tener de la formación electoral. Y eso, es comprensible, molesta mucho. Yo también me quejo de ello y animo a ese partido a repensar su forma de relacionarse internamente con el resto de IU.

Sin embargo, las críticas van más allá y se internan en la esencia misma de la directiva, cual es la ruptura del pacto constitucional. De hecho, se acusa al PCE de convertirse en antisistema, o poco menos.

Yo creo que cuando se habla del "sistema" (creo que todos entendemos a qué se refiere este término), sólo se puede estar a favor o en contra. No estar en contra, por tanto, significa defenderlo. Se añadirán los matices que se quiera, pero la defensa del sistema seguirá en pie.

Yo no defiendo este sistema. Tampoco esta constitución. A diferencia de don Javier, no me abstuve en el referéndum gracias al cual ganó carta de naturaleza, sino que voté en contra sin temor alguno a las supuestas confusiones con la ultraderecha. También fui a ver películas de los hermanos Marx que, a buen seguro, fueron vistas por ultraderechistas, y no por ello me confundí con ellos.

Hoy no estoy en contra de esta constitución por más motivos de los que tuve para votar en su contra en 1978, sino por los mismos. Entonces ya era posible anticipar el resultado a pocos años vista de aquel pasteleo inmenso que dio lugar a todo el pack completo que dio en llamarse la Transición Española (así, con mayúsculas), y por tanto era también posible saber si uno estaba a favor o en contra.

En los tiempos que corren, ser antisistema puede que resulte algo ingenuo, propio de chavales de dieciocho años. Pero ser prosistema está a punto de entrar en el campo de lo delicitivo. El desastre de todo tipo al que este sistema nos está llevando (y al que nos va a llevar más aún en breve) justifica la decisión radical de enfrentarse a él, de situarse en contra suya. De ser anti-él.

Naturalmente, el pragmatismo siempre tendrá espacios lógicos de existencia. No pretendo lanzarme a la calle, los bolsillos llenos de piedras o de cócteles molotov, buscando un Palacio de Invierno que tomar, cueste lo que cueste. Mi disposición antisistema para lo más que da es para buscar razonablemente una opción política que sintonice con mi forma de ver las cosas (he dicho bien, no es al contrario) y participar, por medio suyo, en la tarea de cambiar el sistema. Todo muy pacífico, muy razonable, muy europeo... Pero muy en contra del sistema.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Estoy completamente de acuerdo con usted.
Yo no hubiera podido explicarlo mejor.
Seguiremos reivindicando que otro mundo es posible, PERO DE VERDAD.
Hemos leido su artículo, y compartimos su visión del asunto en gran medida.

En cuanto a la opción de nuestro partido (PCE) de pedir que se lleve esa iniciativa a las instituciones, creemos que no tiene por intención suplantar a IU, que es quien debe decidir que hacen sus cargos públicos. Creemos que invita en realidad a llevarla primero a IU, como propuesta y si es compartida por el resto de compañeros, impulsarla. Aunque sencillamente no entendemos que no sea compartida por compañeros que no son del PCE, pues es una posición bastante coherente con los documentos de IU.

Un saludo republicano.

Asi lo entendemos nosotros.
SyrianGavroche ha dicho que…
Veo a IU desde fuera, y la verdad es que, a parte de lo que Ud. plantea y muchas cosas mas... creo que hay unos cuantos que tienen que reunirse alrededor de un café y hablar.. Es una pena lo que está ocurriendo


Un saludo
MADISON ha dicho que…
Se me ocurre una pregunta, ¿plantearia lo mismo el PCE, si tuviera 23 diputados? cada uno que conteste lo que quiera yo digo rotundamente NO. y a partir de ahi que se extraigan las conclusiones oportunas.
J. G Centeno ha dicho que…
Una aclaración, solo una Don Antonio, nuestra postura en el ayuntamiento de Alpedrete fue absolutamente independiente, aunque sin duda coincidente, con lo que usted llama directiva del PCE. Hubieramos tomado la misma postura de todas maneras como lo demuestra el hecho e que en nuestra toma de posesión prometimos por imperativo legal, si bien yo sólo añadí la coletilla al apartado correspondiente a la lealtad al rey (hubiera faltado).
Anónimo ha dicho que…
Con el permiso de Antonio, aprovecho este espacio para comonvocar a quienes podáis asistir a una MANIFESTACIÓN EL 14 DE DICIEMBRE A LAS 12H EN EL METRO DE RIVAS URBANIZACIONES EN DEFENSA DE LA SANIDAD 100 X 100 PÚBLICA.

Seguimos en la lucha.
Anónimo ha dicho que…
Suscribo todo lo que dice, a mi nunca se me han caido los anillos por decir que estoy en contra de este abominable sistema. Lo único que puedo criticar de esta decisión son las formas, quizás una declaración de este tipo y la propuesta de posibles mociones deben pasar antes por el CPF de IU, ya que es nuestro referente electoral.
Antonio Flórez ha dicho que…
Don Madison: no sé lo que plantearía el PCE con 23 diputados. Comprendo que es una conjetura lógica y no me parece del todo demagógica, ya que entiendo que con ella pretende usted llamar la atención sobre las auténticas motivaciones del PCE en su conjunto para plantear ahora esta política.

Pero siempre he pensado que hay que discutir y criticar cada cosa a su debido tiempo, no por vía interpuesta. Si hay algo criticable en una propuesta, hayq ue criticar eso. Lo demás hay que buscar la forma de criticarlo en tiempo y forma.

No he sido nunca miembro del PCE ni he ocultado nunca mis reservas respecto a la historia de ese partido. Tampoco su práctica política en los últimos treinta años me resulta asumible. Pero me niego a estigmatizarlo por lo que muchas veces creo que se le estigmatiza: por el hecho en sí de ser un partido (cosa que tiende a verse en IU, en mi opinión, como una especie de resistencia fósil a la modernización política) y por ser el único partido. Y a mí la fórmula partido me sigue pareciendo no sólo válida, sino la más válida y la más democrática de las que conozco.

Un saludo.