Cada vez que hablan, sube el pan

Como si se tratase de un drama televisivo, cada vez que un médico de las finanzas de esos que tanto abundan en los círculos ministeriales, en los del sagrado y cerrado círculo de los economistas o en el de los funcionarios de las entidades financieras, se empeñan en transmitir "con toda la claridad" al público la idea de que nada serio pasa en la economía mundial, cada vez que eso pasa una nueva víctima ve agravarse su situación.

Hace un par de días el banco Northern Rock era auxiliado por el Banco de Inglaterra en términos de facilitarle acceso a un crédito de emergencia para que pudiera continuar sus negocios. La autoridad bancaria británica aseguró a quien quiso oirla que la empresa no tenía problemas de gestión, sino de liquidez motivada por las turbulencias en el mercado internacional del dinero. Lo que se quería transmitir era tranquilidad y lo que se consiguió fue que una gran masa de egente se apresurase a dirigirse a las oficinas del Northern Rock para retirar sus depósitos. Han retirado nada menos que 2.700 millones de euros... ¡¡en tres días!! La cifra supone en torno a un 6% del total de fondos del banco, un palo muy grande.

Claro que leyendo las declaraciones supuestamente tranquilizadoras de las autoridades económicas y financieras británicas, no me extraña que el efecto sea el contrario al esperado. Callum Mc Carthy, presidente de la entidad británica de regulación bancaria: "Para que quede absolutamente claro, si nosotros pensáramos que el Northern Rock no es solvente, no le habríamos autorizado a permanecer abierto" (o sea, pensamos que es solvente, lo que nunca quita un error de apreciación al respecto). Alistair Darling, ministro de Economía británico: el Northern Rock es "solvente y capaz de mantener su actividad con el apoyo del Banco de Inglaterra" (¡¡con el apoyo del Banco de Inglaterra!! ¿Se imaginan el efecto que esa coletilla puede producir en quienes tienen depositados fondos en ese banco?). Parecen estas autoridades empeñadas en hacer bueno el dicho español: "Cada vez que habla, sube el pan".

Al menos nuestras autoridades, siempre más recias y concluyentes que los sibilinos y matizadores británicos, aseguran que los bancos españoles no tienen problemas y que lo dicho por un dirigente del banco británico mencionado, acerca de que tres bancos españoles habían acudido también en busca de créditos de emergencia del Banco Central Europeo, no es cierto.

Y ya está.