No valen todas las formas de hacerse rico
Leo hoy las medidas que el nuevo gobierno balear de centro-izquierda pretende tomar para paralizar o echar atrás las barbaridades ya aprobadas y encarriladas por sus antecesores, los muchachos de Jaume Matas. Sinceramente, después de ver todos los frentes que quieren abrir, llego a la conclusión de que los planes del PP en esa comunidad autónoma equivalían a destruir el territorio.
Lo mismo debería hacer por vía de urgencia el Gobierno español (quizás ya no quede tiempo en esta legislatura, pero debería plantearse para la siguiente). Yo diría más: debería hacerlo aun cuando con ello se jugase la victoria en las elecciones del próximo año. Lo que está en juego es mucho más que el gobierno durante cuatro años: en la subsistencia de una geografía global.
Nadie tiene derecho a pretender enriquecerse a costa de destruir el entorno para sí y para el resto de la humanidad. Aunque yo no viva en Cullera, debo tener derecho a interponer mi veto ante la destrucción (no la modificación discutible, no la mejora criticable...: la destrucción) de geografías irrecuperables.
Nadie tiene derecho a elegir a un alcalde corrupto porque los planes de éste van a traer la "riqueza" y el "progreso" al pueblo. Esa forma de enriquecerse no vale. Me da igual que otros sí lo hayan podido hacer antes, esto no puede convertirse en una desbandada con el "tonto el último" puesto como divisa en la bandera de cabeza.
Alguien debe decir alto y claro que no son legales ni viables todas las formas de hacerse rico. Pongámosle al campo cuantas puertas sean necesarias y no escatimemos en el gasto para lograrlo.
Lo mismo debería hacer por vía de urgencia el Gobierno español (quizás ya no quede tiempo en esta legislatura, pero debería plantearse para la siguiente). Yo diría más: debería hacerlo aun cuando con ello se jugase la victoria en las elecciones del próximo año. Lo que está en juego es mucho más que el gobierno durante cuatro años: en la subsistencia de una geografía global.
Nadie tiene derecho a pretender enriquecerse a costa de destruir el entorno para sí y para el resto de la humanidad. Aunque yo no viva en Cullera, debo tener derecho a interponer mi veto ante la destrucción (no la modificación discutible, no la mejora criticable...: la destrucción) de geografías irrecuperables.
Nadie tiene derecho a elegir a un alcalde corrupto porque los planes de éste van a traer la "riqueza" y el "progreso" al pueblo. Esa forma de enriquecerse no vale. Me da igual que otros sí lo hayan podido hacer antes, esto no puede convertirse en una desbandada con el "tonto el último" puesto como divisa en la bandera de cabeza.
Alguien debe decir alto y claro que no son legales ni viables todas las formas de hacerse rico. Pongámosle al campo cuantas puertas sean necesarias y no escatimemos en el gasto para lograrlo.
Comentarios
El mejor instrumento que han tenido los especuladores para hacerse ricos a costa de los demás ha sido la Ley del suelo, que debía haber sido derogada ipso facto hace tres años. No se hizo nada y a sí nos crece el pelo.
Hay cosas que no deberían estar transferidas o, de estarlo, alguien ejercer un control férreo (está claro que no se puede dejar en diez mil manos).
Lo de Baleares es sangrante. Desde que yo estuve allí trabajando en el verano del 95 hasta hoy, estoy segura de que no reconocería la isla.
Lo mismo podemos decir del litoral cantábrico.
Desde hace unos años, a medida que la autovía va llegando más lejos (sentido Bilbao-Galicia), se va urbanizando la costa en una proporción inusitada. Apenas existen ya prados vírgenes en la costa asturiana.
Es una absoluta vergüenza.
”Hay cosas que no deberían estar transferidas o, de estarlo, alguien ejercer un control férreo (está claro que no se puede dejar en diez mil manos).”
En mi opinión debe transferirse todo lo que no necesite una autoridad estatal para funcionar adecuadamente. Será necesario coordinar los distintos intereses autonómicos por medio de los actuales instrumentos inter-territoriales.
Concretamente la ordenación territorial es una competencia claramente apropiada para ser gestionada desde el gobierno autonómico, siempre de acuerdo con las infra-estructuras de rango estatal.
¡Claro que debe existie un control¡ y ya existe, la LEY y el poder judicial que debe hacerla cumplir y castigar la corrupción.
¿Hace falta recordar los estragos que el capital madrileño ha causado en el Mediterráneo?
Cuando los valores morales se subvierten, a todos los niveles, los gobernantes no son más que un reflejo de la sociedad de la que emanan.
Lo cierto es que yo pienso que, efectivamente, se debe transferir a lo local todo lo posible, porque creo que se gestionan mejor las cosas desde la cercanía.
Lamentablemente, no tienes que recordarme qué capitales rondan nuestras costas, madrileño, gallego, árabe o meimportaunpitoviudo de dónde. El problema existe y debe ser difícil atajar cuando tenemos el litoral como lo tenemos (y lo que no es litoral también)...
Dicho lo cual, me reitero en que el Estado debe ejercer sus poderes donde haga falta. A través de leyes o de lo que sea.
No generalicemos que después nos regañan (toda generalización es, por esencia, injusta, y, por naturaleza, estúpida)
Y no hablo de legalidad, ojo.