Las tareas de Hércules de la izquierda

Otro de los elementos que Andrés Ortega incluía ayer entre las razones de la "cuesta abajo en la rodada" de la izquierda europea en general y española en particular (*) es, sorprendentemente, la desaparición en nuestro país de lo que Ortega denomina la "extrema izquierda". No sé si el periodista se refiere con ese término a los pequeños partidos y al conjunto de organizaciones y asociaciones del entorno de la izquierda radical que en las dos últimas décadas tuvieron en este país una significativa relevancia e influencia en algunos sectores; o bien se refiere, en ese caso de forma muy sumaria, a Izquierda Unida.

Sea como fuere y refiriéndonos a España, creo que tiene razón, al menos, en un sentido: la izquierda ultrapragmática en que se ha convertido paulatinamente el PSOE no encuentra apenas contrapeso por su izquierda en algo que mantenga los principios, que recuerde y mantenga vivo entre la gente el acervo cultural, ético y político de lo que ha significado históricamente la izquierda. Es una cuestión que precisamente se ha planteado en los comentarios a una entrada de Animal Político en su bitácora y que se ha comenzado a tratar creo que de forma útil.

La situación actual, con una tendencia cada vez más desaforada a medir únicamente los resultados electorales y las cuotas de poder institucional (y, a través de él, de poder económico), se mostrará más temprano que tarde inviable. En este contexto, la tendencia de Izquierda Unida, que sería la única fuerza ubicada en la posición idonea para jugar el importante papel antes reseñado de la "extrema izquierda", es, por el contrario, a asimilarse al PSOE. Se buscan más parcelas de poder porque se entiende que sólo el poder dará más significación y, a su vez, la significación y la relevancia, dará más influencia política.

En Alemania ya hay quienes han decidido que no, que hay que encontrar un contrapeso a la progresiva caída en el conservadurismo del SPD. La ventaja que tienen Oskar Lafontaine y los demás es que han puesto manos a la obra cuando aún sus fuerzas son visibles, cujando aún la sociedad les reconoce y no les da la espalda simplemente por anecdóticos e inviables.

En España, Izquierda Unida tiene, creo yo, dos asignaturas pendientes para transitar un camino similar: la primera y más importante es la de hacerse consciente de que ese debe ser su camino; la segunda, cambiar paulatinamente su cultura política y de funcionamiento interno para conseguir atraer a los grupúsculos y personas que han ido quedando aislados en múltiples islas lejanas en el mundo de la izquierda.

Más adelante quedaría otra tarea que hacer, de la máxima importancia: no pretender convertirse en LA izquierda, sino ser consciente del enorme capital humano y político que se cobija bajo el paraguas del PSOE, tanto en sus propias filas como fuera de ellas, y apernder a relacionarse con esas personas en clave global de colaboración y no de enfrentamiento.

_______________________

(*) Por su no aparición en la versión electrónica gratuita de El País y su interés como catálogo de temas para una discusión sobre la situación y el porvenir de la izquierda en Europa, reproduzco aquí el artículo de Andrés Ortega, mencionado ya en dos ocasiones en esta bitácora y alguna más en otras que he leído.
  • En lo que falla la izquierda

    Andrés Ortega

    Francia y Bélgica han sido los dos últimos países que han vivido la subida entre el electorado de las opciones de derecha o centro-derecha. No son los ~jnicos. Antes que ellos, este fenómeno se ha producido en Austria, Alemania, Finlandia, Países Bajos, Polonia y Suecia, entre otros. Sólo parece escapar a esta tendencia —al menos de momento— la Europa meridional (incluido el sur de Francia, donde los socialistas han tenido sus mejores resultados), pero ni la izquierda italiana ni la española parecen en disposición de influir realmente en el debate continental o global de hacia dónde ir.

    Izquierda-derecha. La división ya no es tan útil para entender lo que pasa en Francia cuando Nicolas Sarkozy nombra ministro a Bernard Kouchner o le roba una parte de su programa a Jean-Marie Le Pen, en un intento de controlar ese espacio que Blair entendió bien como Tercera Vía. La derecha está cambiando (salvo en España, aunque ahora hay signos de ello). Sea como sea, cabe poca duda de que la izquierda, especialmente la socialista o socialdemócrata, se enfrenta a graves problemas. En Europa, la derecha tiene hoy un discurso más articulado para las preocupaciones que emanan de la ciudadanía.

    La abstención. Es el general invierno de la izquierda en casi toda Europa. La participación favoreció al PSOE en las generales de 2004; la abstención le ha dañado en las municipales, como a los socialistas franceses en las legislativas. En la izquierda, como en la derecha, los partidos han dejado de ser ámbitos de militancia, para quedarse únicamente cómo instrumento de poder.

    La globalización. Es la derecha la que se muestra ahora más proteccionista en esta Europa con una visión más nacional. Y la izquierda no aporta soluciones respecto a los grandes retos del desafio económico chino u otros.

    La inmigración. No hay un discurso de izquierda contra la inmigración, no sólo ilegal, mientras la derecha sí lo tiene (aunque no la solución) y lo aprovecha, como en las municipales en Éspaña, o las generales en Holanda y Francia.

    Las identidades. La derecha enarbola mejor que la izquierda.las banderas identitarias estatales (¡La Republique!) u otras (Escocia es una excepción; Cataluña, otra

    No hay nada a la izquierda. Entiéndase, en nuestros países europeos, la derecha suele tener una extrema derecha a su vera, pero la extrema izquierda ha desaparecido de forma significativa en muchos países.

    La seguridad. La internacional y la ciudadana. El discurso de la derecha es más fuerte, aunque sea ella la que en Francia y en España ha reducido el número de polcías. Y los demócratas en EE UU están teniendo serios problemas de credibilidad por su falta de política alternativa respecto a Irak.

    Los derechos humanos. Resulta bastante increíble, pero la derecha le ha quitado a la izquierda la bandera de la defensa de los derechos humanos en el mundo. Aunque luego poco haga. Vale tanto respecto a Cuba como a China. Incluso Bush agita esa bandera, pese a Abu Ghraib, Guantánamo y los vuelos secretos de la CIA.

    La espiritualidad. Lo decía recientemente Werner Perger de Die Zeit. La izquierda en Europa tiene que recuperar un cierto discurso espiritual. Se lo está dejando arrebatar por la derecha religiosa.

    La corrupción. Parece que se le perdona más a la derecha, como si fuese algo consustancial que a la izquierda a la que, cuando gobierna, se exige pureza.

    La nueva derecha no es conservadora. Se presenta con muchas ganas de cambiar las cosas. Aunque soluciones, lo que se dice soluciones, no las tiene para los problemas de hoy. En cuanto a la izquierda, se recuperará si se renueva, si afronta esos y otros problemas sin perder sus esencias, y si un demócrata entra en la Casa Blanca. Como entendió el primer Tony Blair, una izquierda europea sin una componente americana no tendrá fuerza suficiente en este mundo.
  • (Publicado en El País, 18 de junio de 2007)

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
No le falta a usted razón en cuanto a lo de IU. Es que ese era el proyecto original, que buscaba aglutinar a las personas de izquierda más allá de su procedencia.

Cuando yo entré en Iu había un montón de independientes y de gente que provenía de los movimientos sociales. ¿Donde estan ahora? En IU no. Fueron apartados paulatínamente por una concepción determinada de entender el poder en IU -Yo soy el fundador y tengo la mayoría: yo mando-. De ahí la pelea constante entre el PCE y el resto de iU por el control de lo cada vez menos que queda.

A la izquierda de IU cada vez hay más gente.
HIPATIA ha dicho que…
Cuando hace unos días cité este artículo en otra entrada de este blog confesaba mi cercanía a la izquierda política y mi actual no militancia en ningún partido.
Por ello entiendo que me corresponde más escuchar que hablar en este tema.
Y como tampoco soy analista político me voy a limitar a exponer la opinión de un ciudadano preocupado por este decaer de las organizaciones políticas que mejor deberían representar mi ideología.
Supongo que no es necesario hacer memoria, todos tenemos presentes la inmediata historia política, ahí están las hemerotecas y las innumerables publicaciones, p.ej. El desplome de la Izquierda de Ignacio Sotelo.
Tampoco faltan explicaciones, justificaciones, desde la realidad compleja de un mundo globalizado que de un modo resumido pero completo encontré en el libro La Política en el laberinto de Justo Zambrana por citar uno entre muchos.
Bien está conocer la historia reciente y las causas de los acontecimientos pero a partir de ello es necesario avanzar, proponer soluciones, intentar alternativas. Todo menos NO hacer nada, resignarse, aceptar que el neo-liberalismo es imbatible y que hemos de jugar en su campo.

Desde el exterior y admitiendo de entrada mi posible percepción errónea quiero enumerar algunas ideas.
- Los partidos de izquierda han abandonado su tarea de formación cívica. El uso que hacen de sus propios medios y de los afines se limitan a la propaganda ,la repetición de consignas y tópicos o a la fácil condena, muchas veces demagógica, del adversario (empleo demagogia como simplificación en temas complejos para mejor vender la opinión).
- Se ha confundido el fin con los medios. El fin es alcanzar el poder para mejorar la sociedad y el medio es el poder. Si para alcanzar el poder se renuncia al objetivo el resultado es un mayor alejamiento del fin pretendido.
- Por diversos procedimientos las estructuras de los partidos deben buscar la participación activa de los militantes. El poder tiende a anular la competencia ¡y al competente¡. Una clara limitación temporal pudiera ser una medida apropiada.
- Los partidos no buscan el apoyo crítico, prefieren el apoyo incondicional. Aquí funcionan como las sectas, ofrecen dogmas, consignas y demonización absoluta del adversario. Esto es un error. Un adepto es un voto seguro…hasta que cambia de equipo, un partidario crítico es un activo que revaloriza su apoyo con muchos votos.
- El sistema actual de democracia representativa por partidos ha funcionado suficientemente bien en un mundo dividido en estados con fronteras definidas dentro de las cuales el poder político es plenamente independiente para tomar decisiones sin ingerencias que lo mediaticen. El mundo actual no se corresponde a este modelo. El poder real es difuso y está distribuido en una compleja red de intereses universales, desde las corporaciones capitalista-financieras, hasta la ciudadanía mundial preocupada por el medio-ambiente pasando por múltiples ONG con su acción político-social independiente (más o menos) del poder político. Por todo ello los partidos deben abrirse a esta realidad, sin miedo y con generosidad. Escuchando y aceptando la participación plural sin exigir la aceptación de su ideario, de su estructura y de sus estatutos.
- Con esta participación activa del conjunto social puede enriquecer la muy pobre respuesta que ofrecen actualmente a estos problemas. Y aceptar la participación NO es interpretar a la sociead y erigirse en sus defensores.
- Y quiero suponer que ganarían votos. Los votos de ciudadanos que deseamos poder ilusionarnos no tanto con un partido como con un programa con menos promesas competitivas y más tensión utópica.

Si para ganar el futuro fuese necesario perder el presente mi prioridad está en el futuro.
Estoy convencido que el futuro pertenece a los valores que son patrimonio de la izquierda: “liberté, egalité et traternité”.
animalpolítico ha dicho que…
Es inevitable que la fuerza hegemónica de la izquierda centre en sí misma la acción tradicional de la este ámbito ideológico.

Y es inevitable, me temo, que una fuerza con vocación de ganar las elecciones tolere una dosis de posibilismo. Siempre es delicado decidir hasta dónde la dosis es pago legítimo para poder llevar el timón de la sociedad y transformarla y desde dónde es claudicar y gobernar abandonando en el proceso una parte excesivamente fundamental de las esencias ideológicas.

No me convence el artículo de Ortega, que en varios puntos leo como una aproximación superficial y ventajista basada en datos muy coyunturales.

Eso sí, comparto plenamente con usted que, sea como sea, es fundamental una mucho mayor aglutinación de la izquierda en, como mucho, dos grupos, que, además, deben coordinarse bien, entenderse y comprender que comparten un objetivo aunque disientan ocasionalmente en las estrategias para alcanzarlo.

Un abrazo
AF ha dicho que…
Muchas gracias,don Mowgli, por el esfuerzo, que sin duda lo es, de elaborar todo el comentario. Me resulta más que interesante y le pediría, si tiene ganas, que desarrolle más el punto 5 ("El sistema actual de democracia representativa por partidos ha funcionado suficientemente bien en un mundo dividido en estados con fronteras..."). No veo ningún punto en el que esté en desacuerdo o sobre el que tenga algo más que decir así, al pronto.

Animal: yo creo que el artículo de Ortega es interesante por lo que digo en la entradilla al mismo: porque es un catálogo muy abreviado y, por tanto, bastante funcional. Es el tipo de cosa que escribe un periodista que dispone de poco espacio y renuncia a la sutileza y al matiz para decir en bruto las cosas que más se entiendan. Como tal listado me parece útil porque sirve de referencia. Admito, eso sí, que debe uno vigilarse, porque es muy cómodo contar con un listado y, sin darte cuenta, despreocuparte de reflexionar sobre si debe ser ampliado o no.

Respecto a la sutil frontera a la que haces referencia, creo que sólo es posible detectar que se ha llegado a ella si previamente se explicita el lugar del mapa donde se halla. Ese es el sentido de los escritos y los compromisos, pero no de los compromisos vacuos de las elecciones, sino de los compromisos serios en el seno de la organización.
AF ha dicho que…
Don Javierm: exactamente en eso estaba pensando cuando he mencionado lo de la relación con personas que han quedado fuera. Yo también recuerdo el proyecto original, aunque en mi caso desde fuera, y si no estuvimos por él mucha gente fue por el recelo hacia quién lo planteaba y no tanto por el planteamiento en sí.
Imperialista ha dicho que…
Pues a mí el artículo de marras me parece que es una mierda pinchada en un palo escrito por alguien que no tiene ni puñetera idea pero le pagan por ello. No llega a ser tan gilipollas como MOWGLI pero se le acerca: todo se arregla con Gore en la presidencia de los EEUU y destapando el tarro de las esencias. Menudo soplapollas.
HIPATIA ha dicho que…
Entiendo que el visitante de un blog si desea colocar un comentario debe limitarse a apuntar ideas evitando los tratados que ningún editor de papel le acepta. Pero en este caso intentaré cumplir con la solicitud que se me hace lo más breve posible y lo más claro que el sueño me permita.
No conocía yo esta faceta masoquista de D. Antonio Flores.
Pues nada, ahí va, si no tuvo bastante con el anterior rollo,continúo

El párrafo indicado apunta a la manida globalización. Aceptando que no es una situación nueva, que la globalización empezó con la colonización de América hace cinco siglos, que el capital europeo se invirtió desde entonces en empresas universales sin embargo si hay, a mi entender, una diferencia de calidad causada por un incremento de cantidad en algunos aspectos.
Las nuevas tecnologías de la comunicación, el transporte y la información han permitido una situación radicalmente diferente y con consecuencias novedosas.
Describo como ejemplo la deuda pública que causó en EEUU la guerra de Vietnam.
Anteriormente se habían producidos circunstancias de similar o superior importancia, p. ej. la ruina de la empresa francesa que construía el canal de Panamá, o la pérdida de Cuba y Filipinas para el reino de España. Pues bién, ninguno de estos hechos produjo efectos globales, quedaron reducidos a las fronteras de sus respectivos estados.
A diferencia yo mantengo, y a continuación justificaré, que la guerra de Vietnam fue la causa directa de la gran depresión económica de los años ’70.
La deuda causada por la guerra fue financiada con deuda exterior. En previsión de no poder hacer frente a la convertibilidad que obligaba Bretton Woods Nixon decide unilateralmente no garantizar dicha convertibilidad con el consiguiente final del sistema de cambios fijos. Simultáneamente los paises petroleros se hacen conscientes de que los EEUU no son invencibles y deciden elevar el precio del petróleo. Sin un sistema de cambios que obligue a la contención los gobiernos comienzan una carrera de emisión de deuda con el consiguiente aumento del interés para colocarla en el mercado lo que produce inflacción galopante y ruina financiera de las empresas.
Todo este discurso para justificar que un hecho localizado y relativamente menor se propaga a todo el sistema. Hay otros ejemplos como el efecto tequila, la crisis asiática y varios más, pero he preferido citar el caso de Vietnam por tener origen en un asunto político localizado con repercusión brutal en la economía mundial.
Espero haber ilustrado la idea de cómo las fronteras estatales hoy no son capaces de aislar un pais, ni pueden fijar el espacio de soberanía y poder de un gobierno a diferencia de lo que suponían las fronteras hasta los años setenta, y como escribí más arriba a causa del incremento de la comunicación e intercambios que permiten las nuevas tecnologías.

En este contexto, las organizaciones políticas de ámbito estatal están fuera de juego.
No es la democracia lo que está en crisis, son éstas organizaciones.
La democracia, como escribía no hace mucho en otro blog un buen amigo mio es algo muy sencillo: “para mi la esencia de la democracia es muy sencillo de explicar:
- Todos tenemos los mismos derechos políticos.
- Todos los votos valen igual porque cada uno sabe lo que es mejor para él.
Quizá no se consiga lo mejor para todos pero es seguro que se alcanza lo mejor para la mayoría. Bueno, para ello los ciudadanos deben estar informados, esta es su obligación”

Y este sencillo principio sigue siendo válido.
Pero es necesario disponer de organizaciones que puedan articular estos votos a nivel global.

El PODER económico financiero se ha adelantado con sus foros, sus BM , FMI y el hoy devaluado G-8.
Y sin adversarios a ese nível les resulta fácil pregonar que son la única alternativa.
Ahí está el trabajo, pero los partidos estatales están “acojonados”. Tiene miedo a hablar contra ese discurso hoy dominante, dominante… porque no tiene adversario.
Hoy la izquierda se avergúenza del estado de bienestar, de los derechos humanos, de la solidaridad.
¿Que exagero?. Pues no se sienten muy orgullosos de proclamarlos, si, siente vergüenza de la ley de extranjería, oculta la humanitaria acogida de los inmigrantes, el acceso de los extranjeros a los servicios sociales.
La izquierda está contra la sociedad de consumo, pes no lo he escuchado en ningún mitin, ¿a qué tiene miedo?. Que el consumo es necesrio y beneficioso para el sano crecimiento económico nadie lo niega.
Qué algunos economistas mantengan la conveniencia del consumismo no sigifica que sea cierto, es solamente defender al capital que les paga. La ciencia económica no avala tales simplezas. El sano consumo no es el consumismo. ¿por qué los partidos de izquierda no levantan esta bandera?, los sindicatos aceptan batallitas (involucrar a Internet en su batallita con el Corte Inglés) y olvida la guerra, con la educación en el consumo es donde puede vencer al Capital.
Eso si, caé en la trampa de la derecha y juntitos promueven las asociaciones de consumidores, defender los derechos de los consumidores, ¿qué derechos?, primero pagar y después el derecho al pataleo. El derecho de los consumidores está subordinado a los derechos de ciudadano, defendamos los derechos ciudadanos y el resto se nos dará por añadidura.

La Izquierda Tiene miedo a ser Izquierda.

Exactamente esa idea es la que yo entendí del el artículo de Andrés Ortega.
AF ha dicho que…
Don Mowgli, le ruego sea preciso al escribir mi apellido. Me llamo Antonio Flórez, y no Flores. No estoy muerto aún. Sigo leyendo su comentario segundo.
AF ha dicho que…
Bueno, pues he terminado de leer el comentario. Creo que salta usted un poco de un tema a otro, no acabo de ver cómo engarza los efectos financieros de la guerra de Vietnam en Estados Unidos con la problemática del ciudadano-consumidor.

En cambio, el corolario que usted mismo propone ("La Izquierda Tiene miedo a ser Izquierda") tiene una relación clarísima con el tema que yo propongo en mi entrada. Me parece una buena definición de lo que le ocurre a Izquierda Unida.

¿Y al PSOE? ¿Sería usted capaz de identificar con similar grado de resumen (o con otro grado, no es cuestión de concursar a ver quién hace a frase más lapidaria) lo que le ocurre al PSOE? Porque para mí, con todo y ser la crisis de IU muy grande y evidente, la del PSOE es aún mayor, sólo que aparece como larvada porque su permanencia en el poder institucional aleja esa imagen.

Señoras y señores, sin broma ni ironía alguna les pregunto: ¿qué problemas tiene el PSOE?
HIPATIA ha dicho que…
Perdón don Antonio por cambiarle el apellido. Hay algún error más. ¿le echamos la culpa al cansancio después de un duro día de trabajo?.

A continuación le requiero yo ¿por qué me pregunta por el Psoe?, creo que en todo el cometario me estoy refiriendo explícitamente a los partidos de izquierda, y creo que tanto yo como todos los ciudadanos, excepto ud, incluyen al Psoe en este lado del espectro político.

Su pregunta me crea la duda en su correcta intención al leer mi comentario por ello no me parece necesario contestar a la cuestión que plantea en su primer párrafo.
HIPATIA ha dicho que…
Eso sí. Que lo más importante para la izquierda sea echarse basura unos a otros ratifica mi comentario. Los partidos de izquierda están fuera de juego en la realidad del mundo actual
AF ha dicho que…
"Su pregunta me crea la duda en su correcta intención al leer mi comentario..."
No vea en ello ninguna ironía, es que realmente no he visto el hilo entre las dos cuestiones que menciono y que, sin embargo, creo son las más relevantes de su anterior intervención. Será por mi torpeza en la lectura, no lo niego, pero eso es lo que me ocurre.

"tanto yo como todos los ciudadanos, excepto ud, incluyen al Psoe en este lado del espectro político"
Ciertamente, muchos comportamientos de ese partido como entidad política (quiero decir, no de los militantes) no son asimilables, en mi opinión, a la categoría de izquierda. Sin embargo, a efectos de este debate sí creo que se puede incluir al partido en ese sector.

Lo que ocurre es que, tal y como comenta Animal más arriba, el PSOE ha acumulado una serie de problemas específicos del hecho de tener unas cotas de poder institucional muchísimo más elevadas que IU. Esas cotas de poder mucho mayores hacen, por ejemplo, que sus relaciones internacionales a nivel de partido (no de Gobierno, quiero decir) sean más amplias y más eficaces que las de IU. Y no me estoy refiriendo sólo a la Internacional Socialista (una coordinación que ya sólo funciona esporádicamente), sino sobre todo a los foros en que puede participar el PSOE y que pueden estar poblados tanto por representantes de la administración norteamericana, como por enviados venezolanos o cubanos.

No dude usted que hay muchísimos más ciudadanos que piensan que el PSOE no es un partido de izquierdas. De hecho, creo ser, de entre los muy críticos con el PSOE, de los pocos que reconocen que en su seno o, cuanto menos, en su entorno, hay muchísima gente con la que hacer muchos viajes hacia el progreso político y social.

"¿por qué me pregunta por el Psoe?, creo que en todo el cometario me estoy refiriendo explícitamente a los partidos de izquierda"
Y por último lo que creo más relevante de su último comentario: me parece (y así me lo he tomado) que su análisis se adapta más a IU que al PSOE por la sencilla razón de que en la primera sí creo que se pueden detectar fácilmente tendencias, preocupaciones y ansias por encontrar un camino de izquierda, aunque pudiera esto aplicarse más a las bases que a una gran parte de la dirección. Sin embargo, no detecto, salvo en sectores mucho menos significativos numéricamente, las mismas preocupaciones en el PSOE. Será porque es un partido mucho más grande (aunque la desproporción verdaderamente importante se establezca cuando comparamos la relación número de militantes / cuotas de poder en uno y otro). Y si no existen tanto esas preocupaciones, creo que malamente puede hablarse de "tener miedo a ser de izquierda", porque, o es que se considera que ya se es LA IZQUIERDA (mayúsculas usadas conscientemente), o bien es que no se le da mucha importancia a esa cuestión.

Un saludo.
HIPATIA ha dicho que…
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
HIPATIA ha dicho que…
Mire AF
Es muy explícita y clara la inclusión del Psoe entre las organizaciones de izquierda. En la primera referencia mía en este blog al artículo que se comenta escribía “…en las listas de izquierda (la unida y las otras)”. Como puede comprobar lo de unida está claramente diferenciado de izquierda y agrupada con todos los demás.

Siento que no sintonicemos, estamos en ondas distintas. Ud está - permítame una expresión un poco, sólo un poco, excesiva- obsesionado con atacar al Psoe y defender a IU. Ésa no es mi guerra.
No deseo insistir, es inútil, creo haber dejado claro en mis anteriores comentarios que no es un problema de representación en organismo institucionales, esos ya los ha colonizado la derecha (¿no lo ha leido? ).

Y termino en donde ud comienza. No vi ninguna ironía, simplemente es una pregunta absurda, salvo que trate de descalificar el conjunto del comentario. Son ideas diferentes sobre el mismo asunto y perfectamente separadas en un escrito bien ordenado. (se puede mejorar el estilo, pero el orden de las ideas está muy claro).
Si lo considera conveniente puedo hacerle un esquema.

Lamento ser un poco, o un mucho, duro en este deabte. Ya me lo han hecho notar anteriormente. Pero es asunto que me indigna.
AF ha dicho que…
Bueno, en realidad, más que duro lo que se pone usted es un poco tonto. Quédese con su indignación y aprenda a discutir... y a hacer esquemas.

Un saludo.
Imperialista ha dicho que…
Si ya lo decía yo, don AF: este MOWGLI es gilipollas.
Unknown ha dicho que…
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown ha dicho que…
No renuncio a mejorar mi capacidad para debatir, pero no será en este blog donde pueda aprender.
Por lo que tengo observado en esta entrada lo que aquí está muy desarrollado no es la discusión si no más bien la disputa por el poder. ¡Y no es lo mismo debatir que disputar¡

Le dejo en compañía de Imperialista con el aparentemente hace buena pareja
AF ha dicho que…
A su gusto, señor, que para gustos hay colores.
AF ha dicho que…
Don Impe: ya he leído muchas veces en su bitácora tildar de esa manera a don Mowgli. No me parece adecuado, pero es su casa. Aunque agradezco la intención que creo tiene usted de "solidarizarse" conmigo, en la mía le ruego que no deje insultos a nadie. Le he dicho a este señor lo que opino y ya está.

Un saludo.
HIPATIA ha dicho que…
AF,
esta vez sí... con un poco de retraso
La cortesía y elegancia con que me educaron no me han permitido contestar a Imperialista en esta su casa.
Desde el 19 de junio de 2007 23:47:00 estaba esperando este comentario. Más vale tarde que nunca.
¡Gracias ¡.
Imperialista ha dicho que…
Está usted de un tiquismiquis que para qué... no creo que sea un insulto en el caso de mowgli -creo que es una simple descripción y me quedo corto- pero lleva razón en que esta es su casa así que le juro -por Snoopy o que si no se caiga el techo del Vips-no volver utilizarlo, incluso en el caso de defensa propia.

Por cierto, le conmino a que se pase por mi blog -a usted, no al *********** de Mowgli- y lea mi último comentario referido a don Ricardo.

Reciba un cordial saludo.
AF ha dicho que…
Muchas gracias, don Impe. Como siempre, un caballero.