Condening

De todos es conocida la pasión que las condenas levantan en esta España de nuestros pecados. Lo primero que cualquier político correcto y bien educado hace nada más levantarse por la mañana, es explorar atentamente los diarios en busca de acciones u omisiones que condenar. Se han dado casos de diputados que, al pretender explicarles sus esposas la marcha no muy halagüeña de sus hijos en el colegio, han levantado inmediatamente la vista del periódico y han emitido una firme condena del hecho. Ante el estupor de su mujer, naturalmente, que no esperaba reacción tan varonil y mesurada.

Para solaz de sus señorías, ayer tuvieron una oportunidad más para condenar algo, en este caso el atentado con explosivos contra un vehículo español en Líbano. No ha quedado registrada la imagen de las y los diputados tras la emisión de la condena, pero es de suponer que sus pechos se elevaron varios centímetros, henchidos por el orgullo de pertenecer a tan noble cámara de condenadores profesionales.

Sin duda los familiares de los soldados muertos apreciarán en lo que vale la firme condena de los habitantes del Congreso de los Diputados.

Por cierto, ¿ninguna diputada ha pensado exigir de una vez que se termine con la ofensiva marginación implícita en el hecho de que el Congreso sea de los diputados y no de las diputadas?

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Jocoso la verdad. Me he imaginado a sus señorías en el desayuno del domingo con el dominical en la mano, con caras serias condenando los altos precios, la música bakalao muy alta y los piercings de sus hijos.

El caso es que las condenas sirven únicamente para "mostrar" la "altura moral" que se supone debe tener un político, vease condenar actos de terrorismo, violencia doméstica y demás, yo ni lo veo mal ni bien, veo una condena más eficaz medidas contra el terrorismo y medidas contra la violencia de género, eso para mi es una verdadera condena a la par que una verdadera solución.
Blanca ha dicho que…
Sin embargo, antoñito, las diputadas del PP no han "condenado" la machada impuesta por los líderes varones de su partido, que han "condenado" la Ley de Paridad llevándola al Constitucional... a lo mejor es que ellas no "condenan" esa actitud, a todas luces machista, porque son más papistas que el Papa y "condenan", sin empacho, al gobierno de la Nación, que ha sacado adelante una ley que las iguala a los "condenadores" oficiales de las bancadas conservadoras...

¡Condenación! ¡Vaya tropa...!
J. G Centeno ha dicho que…
Vaya por delante mi más absoluta condena a la alcaldesa de Alpedrete. No ha hecho nada especial últimamente, lo cual ya de por sí es motivo de condena, por otra parte si hubiera hecho algo distinto de lo habitual, acercarse a un libro aunque sea de afotos , hablar en castellano, o español, sin cometer faltas de ortografía orales, arte en la que sólo el eximio y afortunadamente desaparecido Jesús Gil y Gil, era capaz de superarla, habríamos de suponer que lo haría con intenciones aviesas, como quemar el libro o insultar a alguien, con lo cual deberíamos condenarla aún con más firmeza. Como puede ver don Antonio estoy pasando por una época de mi vida en la que cualquier pretexto es bueno para meterme con la alcaldesa de Alpedrete, lo comentaré con mi loquero para ver que opina.
En cuanto al cambio de denominación de nuestro parlamento me opongo virulentamente, se empieza pidendo al congreso que diga putadas, hasta ahora decía gran cantidad de chorradas, y las terminan haciendo. Y por lo de Congreso de las Hazputadas no estoy dispuesto a transigir. Yo más bien propondría Asamblea de los Sovietsde ciudadanos y ciudadanas del Estado Español, me parece más serio.
Anónimo ha dicho que…
Estimado antoñito, nuestro comun enemigo pepe, me ha dado tu blog, pero no tu correo, y esto de hablar en publico de cosas que no importan a nadie, pues no es muy correcto, vamo te doy mi correo y me escribes en privado, a ver si lo adivinas: nombre con un año frances y en gmail.
Besitos
Gracchus Babeuf ha dicho que…
Soviet es Asamblea. No me sea redundante.

Y propongo cambiar ciudadanos /as por trabajadores y trabajadoras.
animalpolítico ha dicho que…
Pues yo condeno el condening. Y el exiging, que tambiés está muy extendido: "le exijo a usted que condene lo que yo condeno o si no dejaré de apoyarle al exigirle un condening..."

De risa, si no fuera "pa llorar".