La gente no vota a los delincuentes

Leo en la página del Grupo Popular municipal de Rivas una nota puesta por su portavoz, Roberto Bermejo (esta vez no me equivoco, que ya está bien de equivocarme) en la que el representante del PP asegura que "una banda de asesinos estuvo presente" en el II Foro Social Mundial, celebrado el pasado verano en Rivas. Bermejo se refiere a ETA y "de nuevo" pide explicaciones al respecto al alcalde de Rivas, José Masa (IU) y al líder del partido socio de IU en el gobierno municipal, Guillermo Magadán (PSOE).

Yo creo que la intención de afirmaciones como ésta sólo puede ser la de obtener relevancia, que se conozca algo más a su Grupo y a él mismo. De lo contrario, ¿en qué cabeza cabe realizarlas? Se la está jugando, porque ya se adentra en terrenos pantanosos: si hubo "una banda de asesinos" en la mencionada cita, cabe la posibilidad de que él lo supiera de antemano, en cuyo caso incurriría en un claro caso de negligencia criminal por no denunciar a la policía el hecho; o también cabe la posibilidad de que no supiera nada, en cuyo caso es más que probable que los mismos motivos de ignorancia puedan aplicarse al alcalde de Rivas o a cualquier otro.

Y, más fácil aún, la explicación es que no hubo tal banda de asesinos durante el II Foro Social Mundial de Rivas. Hubo grupos claramente asimilables al movimiento abertzale, a nivel de simpatizantes o al que sea. Pero no simpatizantes de ETA, sino del mundo abertzale. Identificar sin matiz alguno una cosa con la otra es de una simpleza que inhabilita para ejercer cargos de responsabilidad política. Hay una enorme cantidad de organizaciones adscritas a ese mundillo que no son ilegales, ni siquiera con esta Ley de Partidos totalmente anticonstitucional que el gobierno de Aznar (con la anuencia de casi todos los demás, hay que decir) nos legó

Don Roberto, se lo juro: no puede usted ni nadie ir por ahí diciendo que en algo organizado por el Ayuntamietno estuvo presente una banda de asesinos y pedir explicaciones al respecto a su gobierno municipal. Porque cuando pide explicaciones es cuando formalmente está haciendo recaer en ese Gobierno la responsabilidad por tal presencia (suponiendo que realmente la hubiese habido). Y también se lo juro: a la gente no le gusta que haya alguien todo el día diciendo barbaridades alarmantes, cuando se demuestra una vez tras otra que no tienen ningún fondo de verdad tras ellas. Crea una alarma social rayana en lo delictivo, y la gente no suele votar a delincuentes, por lo menos si sabe que lo son.